Tenemos que hablar [Privado Graham]

Estaba en su despacho leyendo un libro que había cogido de la biblioteca. Trataba sobre las criaturas extrañas vistas en el centro de Europa, Godric mentalmente anoto que tenia que ir hacia allí ha explorar cuando tuviera unos días libres. Le encantaba salir de aventuras en busca de criaturas nuevas o artilugios mágicos antiguos, cuanto mas difícil fuera de encontrar mucho mejor, las aventuras formaban parte de su vida aunque ahora con el colegio apenas tenia tiempo ni para planificar una pequeña escapada. Puso los pies sobre la mesa mientras seguía leyendo aunque  las aventuras ya no podía hacerla tanto como quisiera, por lo menos tenia a la familia mas cerca que cuando viajaba y por tanto empezaba a pensar en otras cosas sobre todo en sus tres hermanos menores.

Por Gabriel no se tenia que preocupar ya que era un chico bastante tranquilo y no se solía meter en problemas, cada vez que lo veía tenia un libro entre las manos y estaba absorto en las aventuras de otras personas. Quienes mas le preocupaban eran los mellizos, tenían la edad de plantearse que hacer con sus vidas, Gael lo podía abordar en cualquier momento, entre tanta travesura que le hacia siempre lo tenia rondando y podría castigarle en cualquier momento y hablar con él pero con Graham era mas difícil ya que el joven dormía en la casa del tejón, aunque él sabia que pasaba casi todas las noches en su torre. Dejo el libro a un lado, Graham había cambiado desde que había entrado en el colegio, desde que el sombrero grito la casa de su mejor amiga, el chico parecía que se había aislado de todo el mundo excepto de su mellizo y del mas joven de los hermanos. Quizás debería hablar con él seriamente de hermano mayor a hermano menor. Cogió un trozo de pergamino y su pluma, empezando a escribir


Miro la pequeña nota, escueta pero concisa, no ponía nada malo así que creía que no asustaría a su hermano menor. Con un elegante movimiento de varita hizo que el pergamino tomara forma de pájaro-Ve a buscar a Graham Gryffindor-susurró al pájaro hecho con el pergamino y lo dejo volar fuera de su despacho-Espero que no haya problemas en que lo encuentre~

Miró por el gran ventanal y acto seguido hizo una mueca. Era un día precioso, de viento, de lluvia, una lluvia que en cualquier momento podría volverse espesa nieve, perfecta para divertirse con ella, jugando con Gael o Gabriel. Pero no, tal vez podrían jugar ellos, Graham, en cambio, estaba en la biblioteca, ocupando una mesa en la que cabían cinco magos mas, bueno, cabrían si no estuviera él y un montículo de libros que había conseguido encontrar en la gran biblioteca para realizar un trabajo para  historia de la magia. Era un trabajo importante y extenso y si lo hacía bien no tendría que preocuparse de la nota de la materia hasta final de curso, por eso, el estudioso alumnos se puso a hacerlo meses antes de la fecha de entrega máxima que el profesor había indicado. - Dios, ¡esto es una pesadilla! - exclamó, demasiado fuerte, el muchacho, dejando caer la cabeza sobre un libro, dándose, así, un duro golpe sobre el amplio libro. La bibliotecaria miró a Graham con una especie de cara asesina, allí no se podía perturbar el silencio. Él la miró de vuelta, pero con una cara totalmente diferente: una cara de perdón.

El joven se volvió a centrar en su trabajo, cerró un libro y l puso sobre una montaña de libros que ya se había mirado y no le iban a servir. Miró al cúmulo de libros que aun debía leer y le vino encima una nube de pesimismo y ganas de salir corriendo, entonces, alguien se acercó. - Creo que esto es para ti. - dijo un chico de unos trece años cuya corbata le decía que era de Ravenclaw, ¿le conocía?. Cogió la hoja que depositó el chico en su mano. - Gracias. - intercambiaron sonrisas y el mas joven se volvió a su mesa. Graham miró al chico con desconcierto, después de ver la nota: si, le conocía, ¿porque? No lo sabía, pero le había entrado la curiosidad. Volvió a mirar la nota. - Hermano, vaya momentos eliges. -

Se levantó y sacando su varita de la bota derecha, hizo que todos los libros de su mesa volvieran a sus estantes originales. Caminando de la salida, miró al joven chico que le había entregado el papel y le sonrió ampliamente de nuevo, le había caído bien. Ahora si, se dispuso a dirigirse al despacho de su hermano mayor. ¿Que querría?
Se quedó en el umbral y lo miró. - ¿Querías verme? - dijo el castaño. su expresión no denotaba ningún tipo de sentimiento o estado en aquel momento.

Te he enviado una nota ¿Tu que crees? Anda pasa y cierra la puerta tras de ti, Graham-murmuró mientras le hacia un gesto con la mano para que pasara dentro de su despacho ¿Por donde podía empezar? Sabia que el chico había tenido ciertos problemas con todos sus compañeros de casa ¿el motivo? El león sospechaba que era sencillamente porque seguía molesto de que el sombrero seleccionador no le hubiera puesto en su casa-me gustaría hablar contigo y, por una vez, me gustaría que no discutiéramos por alguna razón

No sabia como lo hacían para que todas las charlas con su hermanos terminaran siendo una discusión con el menor de los mellizos. Godric no era una persona que se alterara con facilidad, había conseguido enfrentarse a muchas situaciones difíciles con un temple envidiable pero sus hermanos le hacían alterar mas que un Colacuerno Húngaro ¿Como lo conseguían?¿Habilidad innata? El mayor no lo sabia pero estaba claro que tenían una facilidad que ningún otro ser poseía y eso desagradaba al fundador, no le gustaba gritar ni enfadarse, menos con su familia. Se suponía que tenia que hablar con ellos para intentar que no tomaran un mal camino como lo habrían hecho sus padres. Desde que habían entrado por las puertas de Hogwarts sus hermanos habían pasado a ser responsabilidad suya, desde su aprendizaje hasta su educación. Bien se lo recordaba su padre en las cartas que a veces le mandaba pero había un problema. Él no era su padre, no imponía como él a sus hermanos por lo que cuando Godric levantaba la voz sus hermanos hacían lo mismo y el mayor terminaba diciendo cosas de las que después se arrepentía. Se llevaba demasiado años con sus hermanos, ademas de que se fue cuando eran solo unos críos, la relación que tenían se había desarrollado en el colegio y solo cuando el hechicero escarlata tenia tiempo

Cerró los ojos unos momentos y se froto la sien ¿Como abordar el tema?-Se que te han castigado, otra vez-fue directo al grano porque irse por las ramas no le iba a servir de nada-¿Me puedes decir, por favor, el motivo? Helga no me lo ha contado y me gustaría saber la razón-dijo con tranquilidad. No le iba a alterar, no esa vez, hablarían tranquilamente hasta que el león consiguiera que su hermano le contara, por fin, el motivo de su actitud-Antes de que te pongas a la defensiva, no te voy a castigar de nuevo ni a regañar, solo quiero hablar. De hermano a hermano...quizás mi error contigo a sido intentar comportarme como padre cuando, obviamente, no lo soy. No te voy a pedir que tengas tanta confianza como le tienes a Gael ni a Gabriel, te has criado con ellos y es normal que te sientas mas cómodo con ellos que conmigo. Solo te pido que confíes un poco en tu hermano mayor ¿de acuerdo? Dame algo de cuartel-dijo sonriendo suavemente para demostrarle que no estaba molesto