Artemisa Black-Scamander || I.D.

DESCRIPCION PSICOLOGICA
Orgullosa, terca, malcriada, caprichosa. Artemisa no se limita a contemplar lo que desea, lo obtiene sin temor a las consecuencias a quien tenga que arrastrar en el camino; es ella, después ella y luego ella una vez más. No piensa en las consecuencias ni mide sus actos, simplemente se deja llevar por sus impulsos, frecuentemente relacionadas con sus caprichosos deseos. Es obsesiva, cuando algo se le mete en la cabeza no parará hasta conseguirlo, aunque sea una absurda idea, lo hará.

Devota de la magia oscura, sueña con llegar a dominar esta con precisión y firmeza para poder eliminar a todos aquellos que ella considera "calaña" y disfrutar de ello; porque sí, Misa es sádica y disfruta haciendo daño a otros, no hay mejor imagen que contemplar que sus propias manos manchadas por la sangre de aquellos a quienes odia, que no son pocos. Utiliza su gran inteligencia para ir ascendiendo en sus aprendizajes clandestinos sobre este arte prohibido y su audacia para ponerlos en práctica sin ser descubierta.

Pero, a pesar de todo lo anterior, es toda una dama. Protocolaria, educada y sonriente cuando quiere, es capaz de encandilar a cualquiera con sus modales de señorita refinada y sus pequeñas manías dignas de una doncella en apuros. Engaña, engaña mucho. Puede estar sonriéndote mientras compartes mesa con ella y observa dichosa cómo ingieres el veneno que te ha echado en la comida. Simplemente una moneda de dos caras, eso es Artemisa.

¿Amor? No cree en el amor para toda la vida, mucho menos desde que se ha visto comprometida con Orion, pero sí cree en algo más fuerte que la amistad y disfruta del deseo que siente y del hecho de sentirse deseada. Le gusta divertirse en todos los sentidos.Y la diversión no sólo abarca a los jóvenes y no tan jóvenes del mundo mágico, sino también sus fiestas de alta y baja sociedad en las que se deja desinhibir por los placeres prohibidos del alcohol y los excesos, aunque siempre manteniendo su clase de niña bien.

¿Amigos? Sí, quizá sí, pero eso hay que ganárselo. Es desconfiada y no suele abrirse ni hablar de ella misma para no mostrar sus debilidades, pero cuando entras en su círculo de confianza, será capaz de poner en riesgo su vida para ayudarte (sólo ponerla en riesgo, jamás morir. Morir no merece la pena). Eso sí, no traiciones a Artemisa, te convertirás en su blanco con todas las consecuencias y no parará hasta haberte destrozado la vida. O quitártela, en su defecto.

Y, ya que no deja ver esas debilidades... ¿cuáles son? Tiene muchas, como todas las personas. Para empezar, pierde los papeles con sólo mencionarle su futura unión programada con Orion, es un tema que convierte a la chica en toda una banshee. Tiene una necesidad terrible de aceptación por aquellos que cree superiores o dignos de mérito y, si en este caso son  hombres, suele sentirse irracionalmente atraída por ellos, aunque en el noventa por ciento de los casos ni siquiera deje ver esto último. Y su gran y mayor debilidad: Salazar Slytherin; su obsesión, la panacea de la figura del mago para ella, el Todo con mayúscula. Haga lo que haga y diga lo que diga, será correcto y, si él le pide a Artemisa que se tire desde la torre de Astronomía, se despediría de Cygnus con un beso y lo haría.

HISTORIA
La más pequeña de los trillizos de la Noble Casa Black, en su segunda generación.Y eso, marcó su vida. Siempre eclipsada por sus hermanos, ya fuese porque Cygnus era el hombre o porque Cassiopeia era la primera mujer, Misa siempre quedó relegada a un tercer puesto en lo que al amor y las atenciones de sus padres se refería. Desde pequeña dearrolló una habilidad para no sentir dolor, para simplemente encerrar sus sentimientos en una caja de mármol y así hacerse independiente y, sí, algo inestable.

A pesar de quedar relegada en lo que a importancia se refería, fue criada en cuna de oro, donde sólo tenía que abrir la boca para ver colmados todos y cada uno de sus caprichos, lo que hizo que desarrollase esa faceta arrogante y caprichosa. Forjó una buena relación con sus hermanos y, aunque él siempre estuvo más cerca de Cassi, pronto desarrolló una extraña obsesión con su hermano Cygnus, el perfecto Cygnus; le admiraba y le amaba a partes iguales. Con Cassi siempre se llevó bien, era algo así como un referente a seguir, pero siempre hubo algo que despertó la envidia de Misa hacia su hermana: el poder que ella poseía para hacer de la gente lo que quisiera y la facilidad para conseguir que todos llevasen el ritmo que ella marcaba, algo que Misa jamás logró.

Fue a los 10 años cuando se dio cuenta de su habilidad para hablar con las serpientes, algo extraño entre los magos y que, por temos a que su padre se alejase más de ella, oculta con celo. La otra "habilidad" que poseé desde su más tierna edad es su devoción por las Artes Oscuras, esa faceta de la magia que está prohibida y que ansía conocer y manejar. Su desprecio hacia los muggles e hijos de los mismos le viene inculcada por la férrrea educación que sus padres le dieron, siguiendo la línea familiar.

A los 11 años recibió la carta de Hogwarts y antes de que el Sombrero tocase su cabeza ya había sido destinada a la Casa Slytherin; sí, Artemisa consigue todo lo que se propone, sea como sea, y su ambición no tiene límites. Y con su entrada en Slytherin llegó la extraña y enfermiza obsesión con Salazar Slytherin. Primero fueron sus palabras lo que hacía que la joven no pudiese dejar de buscarle, pero con el paso de los años llegaron la atracción física y el deseo carnal, además del sueño de llegar a ser algún día Artemisa Slytherin. Sueño que se vio truncado con su compromiso pactado con Orion Black-Lestrange, su primo carnal. Y le odia, le considera poco más que basura, tanto a él como a sus hermanos pero, una vez más, por cumplir con el compromiso que ser una Black conlleva, ha decidido acatar la voluntad de su padre... aunque él jamás dijo que no pudiese hacer vida en paralelo del idiota de Orion.